O noso heroe

Contan as lendas que as terras de Finisterre foron o berce de grandes heroes. Mitos celtas como o de Breogán ou demáis familia. Dese pasado esplendoroso aínda hoxe hai probas palpables. Algunhas de primeira man no caso do mitolóxico presidente deste santo país. Outras son evolución da especie nas que se observan rasgos propios daqueles superhomes. A forza, a resistencia, a sabiduría. Por exemplo en Iván Raña.O heroe da actualidade, o home que debe consegui-la primeira medalla dourada para esta nación. Xustamente foi unha medalla o que puxo en contacto ós dous mitos deste país. Ó evolucionado e ó primate. Ó heroe e ó tirano. A Raña e a Fraga. Foi o ano pasado durante a entrega de medallas no día da patria. Creo que a Iván entregáranlle unha de bronce(as de ouro estaban reservadas para “heroes” coma Cascos). No momento da entrega Iván descubriu a clave de D. Manuel. O segredo que o convirte en invencible. Decatouse de que todo se baseaba na unidade do equipo. Neste caso nun rabaño de caciques coa única idea de protexer ó seu líder, ó cabalo gañador. Tomou boa nota e trasladouno ó triatlón. Mañá Raña presentarase na saída con dous fieles escudeiros, coa única misión de protexelo ata o segmento de atletismo. A partir de ahí Iván debe sacar o celta que leva dentro.Correr por él, por Ordes, por Galicia. Entón cruzará a meta e rodearano coa bandeira do seu país. Branca cunha franxa azul. Sorte Iván.

Un día de locos

Pulso el mando sin control. En la primera se escucha un grito tan repetitivo como emocionante. ¡Paró David! En la dos Eliseo va crecido a punto de coger a los keniatas. No soy capaz de elegir entre dos entregas de caviar deportivo. Cambio sin parar. De repente miro a Barrufet corriendo al lado de un etíope y a Penti parando un penalti. Quiero controlarme pero no puedo. Athenas me está volviendo loco. Un estado mental que está triunfando en estos juegos. A Llaneras se lo llamaron algunos cuando abandonó la carretera por el velódromo. Razones no les faltaban. Sobre todo conociendo el excétrico carácter de Joan. Una locura que Llaneras ha sabido reflejar en su forma de correr. Su actuación de hoy es digna de un poseso. Ataque tras ataque. Excelente. Lo de “Loco” en Argentina es un apodo tan común como últimamente los fracasos futbolísticos. A Bielsa el mote se lo pusieron con cariño. Después del Mundial de Corea y Japón muchos quisieron colocarle la camisa de fuerza. Los locos eran ellos. Del que no se conocía todavía su lado irracional era de El Guerrouj. Igual de desconocido que resultaba para él un oro olímpico. Hoy Hisham se ha desmelenado. Primero mostrando por fin su poderío en unos juegos. Luego celebrando como un loco el añorado triunfo. Athenas se ha convertido en un manicomio. Bendita locura. null

Ruleta olímpica

Un policía griego ha muerto hoy en Athenas. Estaba practicando un juego donde la derrota es demasiado cara. La ruleta rusa. Una práctica que no se comprende ni tan siquiera tras presenciar una jornada de doma clásica, una modalidad tan respetable como aburrida. Si el COI se está planteando eliminar alguna prueba, el baile de los caballos tiene todas las papeletas. La ruleta rusa por ahora no se encuentra dentro del programa olímpico. Aunque hay pruebas con cierta semejanza. Especialidades donde la victoria parece depender excesivamente de la suerte. A Gervasio Deffer siempre le ha gustado vivir al límite. Realizando saltos imposibles para personas de carne y hueso. Después de su victoria en Sidney, Gervi decidió desafiar también a la lógica del deporte.Caminó durante dos años por la delgada línea que separa al campeón del fracasado. Quiso demostrar que él era diferente a los demás. Dejó de lado el manual del atleta. Descuidó su preparación, engordó de manera espectacular, dio positivo... Entonces Deffer sintió miedo. Dudó de si mismo por primera vez. Por suerte para él abrió los ojos a tiempo. Sin que nadie recordara quien era, aquel chaval malcriado de la periferia de Barcelona llegó a tiempo a su cita. Delante de él un potro, un revólver cargado. A sus rivales le ha temblado el pulso cuando lo han tocado. A Gervi no. Él es un tipo duro.

Parellas de feitos

Hamilton é un tipo moi sensible. Tivo que abandonar o Tour hundido pola morte do seu can. Trala súa particular vinganza en Athenas, no medio dunha explosión de cansancio e emoción, repetía extenuado unha soa frase. Quería estar coa súa muller, que alguén fixera o favor de avisala. A Paquillo hoxe pasoulle algo parecido. Despois de cruzar a meta unicamente era capaz de lembrarse da súa parella. Neste caso deportiva. Do seu adestrador, Manuel Alcalde.Unha relación que ía máis alá do deporte. Alcalde era o pai que necesitaba un neno prodixio como Paquillo, o diamante en bruto co que soña todo adestrador. Xuntos formaron un tándem que estaba recolocando a Granada coma capital dun reino. O da Marcha. A Alcalde a vida descalificouno de súpeto. A Paquillo nese momento entráronlle ganas de retirarse. Soamente a súa raza impediulle levantar os pés do chan para sempre. Conchita é boa conocedora desa tentación. Do desexo de abandonar. E moitas veces faino realidade. No medio dun partido a tentación supéraa e ela vaise. Ningúen se dá de conta máis a que queda xogando non é Conchita Senón a súa sombra. Sen embargo nestes xogos a sombra de Conchita é outra. A dunha experta en parellas chamada Vivi Ruano. Unha tenista extraña á que nadie viu nunca soa. Será porque vale dobre.

Constelación proletaria

Naomi Campbell fue una de las últimas relevistas olímpicas. Sus méritos deportivos son de sobra conocidos. Famosa, guapa y con estilo. Valores que desaparecieron de Athenas en el momento que Naomi entregó la antorcha. Desconozco al sujeto que pensó en la top model como símbolo de unos juegos. Seguramente él no conozca a Ekimov. No importa. Ekimov tampoco conoce a la Campbell. Al ciclista ruso le falta tiempo para esos asuntos ociosos. Lleva veinte años sin coger vacaciones. Levantándose verano e invierno antes de que salga el sol. Un proletario del ciclismo. Un fanático del comunismo aplicado al deporte. Un movimiento que en estos juegos ha tomado el poder. Paradójicamente de la mano de un americano. A Phelps si le hablas de Marx o Lenin es posible que te pregunte por qué calle nadan. Quizás si conozca a Ekimov. El ciclista que se cruza todas las mañanas cuando él se dirige a abrir la piscina olímpica.
En España un grupo de proletarios se han convertido en el abanderado. La prensa se empeña en presentarlos como capitalistas. Si Dream Team por aquí, que si generación de oro por allá. Se habla de que como buenos capitalistas tienen Gasolina-dependencia. Sin embargo partido a partido demuestran ser un equipo de currantes. Como por ejemplo Garbajosa. Un ala-pivot sensacional que juega como es. Grande pero por fuera de la zona, lejos de los focos. Un gigante desconocido.

Doble Trap

Aunque el título lo haga pensar, hoy no voy a hablar de música. Sinó del descubrimiento más importante en lo que va de juegos. Una especialidad deportiva que todos hemos probado. La primera toma de contacto se produce en una verbena. En una caseta de tiro. Una experiencia de la que casi nadie sale satisfecho. Te sientes ridículo fallando un disparo a cinco centímetros del palillo.Quizás sea esto, la vía de acceso, lo que impida a esta modalidad de tiro expandirse en la sociedad. El fracaso en en encuentro con el doble trap, no significa que uno lo abandone. Todo lo contrario. Se trata de una actividad tan común como recomendable. Explicaba la medallista española cual era el secreto antes de competir. Visualizar el objetivo y sin pensar dispararle. Soñar con reventarlo. La parte del doble trap que todos practicamos diariamente.Ver en los platillos algo que nos desagrada y hacerlo desaparecer. Desconozco a quien puede odiar tanto la tiradora española para acertar también en la práctica. Aunque si los gimnastas se dedicaran al tiro, seguro que tampoco fallarían demasiado. Su secreto sería visualizar en los platillos la cara de un juez. Esos personajes sin escrúpulos, capaces de examinar y destrozar en segundos el esfuerzo de toda una vida. Francotiradores de sueños.

El tridente perfecto

Valkenburg (Holanda), 1998. Paco Antequera espera en línea de meta bajo un tremendo aguacero. Hace más de un cuarto de hora que Camenzind es el nuevo campeón del mundo. Ningún ciclista español ha acabado todavía la prueba. Antequera desearía tener en ese instante un paraguas. Más que por la lluvia, para protegerse de una tormenta peor. La de las críticas. Sabe que es un blanco fácil. Recién llegado al cargo de seleccionador, con escaso curriculum y menos facilidad de palabra. Un personaje poco mediático. A casi media hora llega el primer español. Un desconocido neoprofesional. Óscar Freire, una estraña apuesta personal de Antequera. A muchos kilómetros de allí, en un pueblo del sureste ibérico seguramente Valverde ganaba una carrera, ajeno al descalabro de la selección en Holanda. Otra victoria más. Una rutina divertida para un juvenil que sólo pensaba en pasárselo bien encima de la bici. Mientras tanto en Ermua, Astarloa miraba en la tele como a Camenzind le entregaban la medalla oro. Igor cerraba los ojos e imaginaba estar en el sitio del suizo. Ser campeón del mundo. Llevar el jersey arcoiris. De repente el sonido del teléfono le despertó. Rapidamente se levanta y piensa que esa puede ser la oportunidad que estaba esperando. Algún director se había decidido a llamarle para ofrecerle saltar a profesionales. Pero cogió el teléfono y la voz de su amigo Horrillo acabó de despertarle de su sueño.
Hoy 13 de agosto de 2004, en el mismo apartamento de la villa olímpica de Athenas descansan Astarloa, Valverde y Freire. Dos campeones del mundo y un subcampeón con trazas de hacer historia. Los tres intentan dormir pero no pueden. En la habitación de al lado ronca el seleccionador más laureado del ciclismo español. Tranquilo el día antes de una prueba que lleva preparando cuatro años. Dicen que este examen es como una lotería. Que depende del día y la suerte. A Antequera eso le da igual. Él tiene todos los números.

A febre do ouro

O COI está estudando reformar a lista de probas olímpicas. Un dos criterios que se usa para valorar son as audiencias televisivas. Segundo isto non sería de estrañar que os dirixentes olímpicos rescataran unha competición da antiga grecia. A loita clásica. Modalidade semellante ó actual “Todovale”. Pelea sen regras na que non se gaña ata matar ó adversario. Unha proba que resultaría máis morbosa cun reality show e simbolizaría o espírito que reina nos días previos a Athenas.
No movemento olímpico desatouse a febre do ouro. Semella que todo vale con tal de conseguir o preciado metal. Ós membros do COI o ouro que máis lle chama é o das moedas. Sen embargo tampouco lle fan un feo a viaxes, becas para os fillos ou demáis regalos. Os deportistas prefiren o ouro puro das medallas. Aínda que a finalidade é a mesma. Fundir os colgantes para convertilos en dólares. O camiño preferido para chegar a este particular “El Dorado” é o máis curto. Pero tamén o máis perigoso. No momento no que os multan todos afirman que a culpa non é deles. Alguén lles indicou este camiño porque eles descoñecían o terreo. Mentres a policía pregunta quen foi, unha caravana de coches de luxo segue o seu camiño. Sen que ninguén os mande parar. Na dirección contraria ó espírito olímpico. Con rumbo a Athenas.

Un olimpo particular

Estiven onte botando contas. Calculei que o normal será que viva oitenta anos. Despois dividín entre catro. Vinte. Serán os xogos olímpicos que poderei presenciar. Parecen moitos mais pensándoo ben non son tantos. Vinte son os anos que teño e cada día me pregunto porque atallo me metín para chegar a eles. Se lle resto os cinco xa disputados, só me quedan quince. Analizando as contas de TVE, contando con que algún día terei que traballar, cos viaxes do inserso...Non esaxero, pero éstes poden ser os meus últimos xogos olímpicos. Polo menos tumbado no sofá. No meu particular olimpo.
Antes de someterme a longas sesións televisivas, creo que é necesaria unha certa reflexión. Marcarse unhas pautas para seguir os xogos. Porque tras doce horas diarias tumbado no sofá corres o perigo de perder a túa independencia mental. Convertirte nun fanático, nun ultra. Así que decidín elaborar unha táboa de dez principios. Todos eles co fin de ser o máis obxetivo posible. Dez mandamentos que se poden resumir só nun . Amarás o deporte sobre tódalas cousas.
1. A representación do meu país confórmana 16 deportistas. O seu abandeirado é o palista Alfredo Bea e as súas estrelas son Iván Raña e David Cal
2. Tódolos deportistas parten coa presunción de inocencia. Se un dá positivo é porque o resto son aptos.
3. O torneo de fútbol ten unha relevancia comparable cun Mundial. Se é tan fácil gañalo, ¿entón porque España ou Francia non foron capaces de clasificarse?
4. Os deportistas, sobre todo os españois, compiten para si mesmos non por un país. Os triunfos e as derrotas son unicamente deles.
5. Os deportistas que dan positivo son tramposos. A expresión drogadicto é pecado.
6. A selección española de ciclismo é un “Dream Team” da bicicleta. Gañar unha medalla depende demasiado da sorte.
7. A cobertura dos medios españois nos xogos só pode denominarse como ultranacionalista. A súa información non reflexa a grandiosidade destas citas.
8. Tódalas especialidades olímpicas son igual de complexas. O valor das medallas é idéntico.
9. O mellor deportista da actualidade non disputa estes xogos. Lance Armstrong non correrá, decisión incorrecta.
10. Por moitas medallas que gañen, os deportistas españois seguirán dispoñendo de trinta segundos en cada telexornal.

Clases particulares

Belda ha sido toda su vida un rebelde. Se rebeló contra la naturaleza cuando era ciclista. No le importaba enfrentarse a los grandes con su escaso metro cincuenta. Como director se opuso a aceptar la lógica del mercado en el deporte. Año tras año conseguía mejorar el equipo a pesar de perder a sus estrellas. Nunca nada le ha marcado el camino. Hasta que topó con la economía. Una ciencia demasiado estricta, demasiado fría para Vicente. Un hombre que siempre ha confiado en sus dotes para la improvisación. Por eso desde que en enero tomó las riendas económicas de Kelme, el equipo decano ha ido de mal en peor. En los exámenes de febrero el tema de los avales se le atragantó. Su suspenso fue tan grave que decidieron bajarlo un curso, a segunda división. En junio Belda seguía sin aclararse con las cuentas. Seguía mezclando el pasivo con el activo y en el equipo nadie veía un duro. Lo vieron tan flojo que en el examen del Tour ni lo dejaron entrar. Con el fin de solucionar el problema, el PaPá de Kelme ha contratado al Elche C.F para llevar las cuentas. Es decir, un profesor particular de economía. En su primera clase le han dicho a Belda que se olvide de números y balances. Porque ahora lo importante es lo deportivo y hay que aprobar en septiembre. En la Vuelta.

Glamour en el Boulevard

La pregunta era una asistencia. Una cuestión hecha a la medida para descubrir al verdadero Perdi. Hace unos meses habría sacado su vena más conocida. La misma que lo llevó a promover un posado de grupo para Interviú o la que asomaba cada vez que un micrófono se le ponía delante. Su lado más clown, menos ciclista. Pero éste ya no es Perdi. Es Miguel Ángel Martín Perdiguero, ganador de una prueba de la Copa del Mundo. Por eso responde a la pregunta como manda el manual del ciclista típico. De manera aburrida y profesional. Perdi habría dicho que esa noche iba a quemar San Sebastián. M.A.M Perdiguero recuerda al periodista que mañana debe disputar la subida a Urkiola. Que no hay tiempo para fiestas.Ayer en el Boulevard donostiarra Perdiguero mostró mundialmente su nueva idea de glamour. Un concepto en el que pesan más el esfuerzo o la confianza que los pintaúñas o los piercings. Los nuevos aires de su actual equipo no bastan para explicar este cambio. Perdi y sus compañeros han encontrado en Matxín a un director joven pero sobradamente preparado. Una bocanada de aire fresco que ha creado un equipo que está arrasando en su primer año. El huracán Saunier Duval.

Shrente

No conozco a ningún niño que tenga como ídolo a Shrek Tampoco conozco a ningún chaval que sueñe ser ciclista y parecerse a Chente. Una porque hay pocos que quieran ser ciclistas. Otra porque los valores del navarro no cotizan a la alza en la actualidad. Esfuerzo, honradez y profesionalidad, sólo por citar algunos. Pero tanto Shrek como Chente gustan a todos. Tanto a niños como mayores, a espectadores como a directores. Nadie se aburre con ellos y ambos resultan muy rentables. Al monstruo de las antenas aún le quedan muchas entregas por ofrecer. Chente debería estar rodando sus últimos capítulos encima de la bici. Más que nada por edad, no por rendimiento. Durante tantos años dándole a los pedales ha tenido tiempo de desarrollar una teoría filosófica. Este mocetón de Tafalla que parece sacado de un anuncio de Bocatta, es ni más ni menos que todo un líder espiritual. Su corriente de pensamiento ha creado escuela en el pelotón y muchos intentan ponerla en práctica cuando van en escapada . Se resume en una única oración. “Antes de coronar el repecho, bajas un piñón y atacas”. Una máxima tan simple y efectiva como su ideólogo. Un héroe con aspecto de ogro.

O seguro de Saiz

Estaba Manolo acostumado a ir o primeiro na caravana que segue ó pelotón. Ós ciclistas que viaxan normalmente a cola de grupo xa lles era familiar o “¡Venga, venga!”. Ese berro desgarrador co que Saiz anima e atemoriza ós seus pupilos. Nesta temporada o coche de Saiz viaxa con demasiada frecuencia moi lonxe dos ciclistas. Mal síntoma. Agora que os seus ciclistas non o visitan tanto durante as etapas, pregúntome con que se entreterá Manolo. Un pasatempos pode ser o de revisar e ler a letra pequena do seu seguro. Trala caída de Beloki no Tour e o desastre de Nozal en Abantos, Saiz fartouse de xogar ó cupón. Comezou a pensar que a sorte non estaba con el polo que decidiu facer un seguro. Acudiu a Liberty cos que contratou a póliza máis elevada. A tarifa Heras. Un seguro a todo risco que o protexía principalmente dos accidentes na montaña.Lugares nos que padece vértigo. A ansiedade por cambia-lo seu signo fixo que Saiz firmara sen ler a letra pequena. Sobre todo pasou por alto unha cláusula respecto a Heras. Nela advírtese que esta póliza non cubre posibles accidentes no estranxeiro. Algo que Manolo xa comprobou no pasado Tour. Porque aínda que no ciclismo non soe haber nada seguro, Saiz ten no seu equipo a un que case nunca falla. Un rapaz de Chapela que cumple tanto en Francia como en Burgos. Marcos Serrano. Todo un seguro.

Quiero ser como Valverde

Si hay algo típico del verano aparte de la siesta, las verbenas y los incendios, eso son las giras musicales. Hablo del peregrinaje que realiza el cantante de moda recorriéndose de arriba abajo toda la península. Tocan en ciudades y en las fiesta de los pueblos donde la economía da para algo más que una orquesta-charanga. En el mundo del deporte las giras también se están poniendo de moda. En este caso lo que se recorre de Norte a Sur es el mapa de Asia. Aunque más que giras parecen mercadillos ambulantes. Los futbolistas se convierten en vendedores de camisetas, bufandas o libros. Entre estos últimos me llamó la atención uno. Se titula “Quiero ser como Raúl”. No está mal como deseo. Ya puestos a elegir yo preferiría ser otro. Mi personaje utópico es un deportista que también hace giras. Se ha recorrido más pueblos y ciudades en este año que “El canto del loco”. Su espectáculo es todos los días el mismo. Lo único que cambia es el decorado. Sin embargo a él le da lo mismo actuar rodeado de montañas que de llanuras. La crítica le pone como pega que sus rivales no pasan de teloneros de segunda fila. Pero es que al lado de este artista todos parecen iguales, como chinos.

Los apátridas

Hay vida después del Tour. Pero la competición que toma su relevo tiene los días contados. Quizás la desaparición de la Copa del Mundo se deba a esto último, a su denominación. Todas sus pruebas se disputan en un pequeño radio de Europa, se la toman en serio cuatro equipos e interesa en dos países. Del Mundo no tiene demasiado. Aunque a veces suceden fenómenos cosmopolitas como el de ayer. Ganó en Alemania un australiano que corre en un equipo francés. Son los ciclistas aussies un caso extraño dentro del pelotón. Llevan ganadas tantas carreras en los últimos años que parecen un país clásico en este deporte. La realidad es otra. Dudo que lleguen a diez los ciclistas australianos profesionales. Aun así seguro que sus éxitos tienen más relevancia que los de otra etnia de corredores. Menos es imposible. Siempre se argumentó que las carreras de un día no calaban en España porque se carecía de especialistas. Ahora que tienen a dos de los mejores del mundo, literalmente se les margina. Sólo se recuerda a Freire y Astarloa cuando se acerca un campeonato del mundo o unas olimpiadas. Entonces se convierten en “uno de los nuestros” y se les coloca la bandera, la de conveniencia. Por cierto el maillot de Igor representa un arcoiris. Es que Astarloa es Campeón del Mundo.

Un segredo a voces

Entón dixo a Virxen de Fátima “ veredes resucitar ciclistas, a outros subir como nunca na súa vida, cousas incribles” Ningún dos pastorciños soubo nese momento que quería dicir aquilo. Agora xa se sabe cal era o terceiro secreto de Fátima. Todo gracias a Jesús. Manzano claro. O iluminado do deporte español relatou que na pasada Volta a Portugal foi cando vira a luz. A causa deste miragre fóra a utilización de productos dopantes en mal estado. Todo o equipo Kelme abandonara na segunda etapa alegando unha intoxicación alimentaria. Un feito que non fai máis que confirmar un segredo a voces. En Portugal aínda hai barra libre.
A lista de inscritos deste ano na Volta lusa máis que un pelotón semella unha redada contra a dopaxe. Corredores cun pasado marcado e equipos cunha fama ben gañada. Basta con analizar ó equipo máis forte desta carreira, o Maia. Dos nove ciclistas que presentan, ó menos cinco xa pasaron unha temporada na sombra. É histórica a viaxe que o ano pasado fixo este conxunto a Francia. Foi cruzar os Pirineos e comenzar a saltar as alarmas. Un positivo tras outro. Unha experiencia que evidenciou que os miragres de Fátima non funcionan máis alá de Lourdes.

El actor secundario

Siempre se dijo que la vida de Armstrong parecía sacada del guión de una película. Observando el domingo el palco de los Campos Elíseos uno puede pensar que la historia ya se está rodando. Allí aplaudiendo a Lance estaban Robin Williams, Will Smith o Sheryl Crown. La ceremonia del podio recordaba a la entrega de los Oscar. La estatuilla de mejor actor y mejor película, a pesar de la mala acogida entre el público, fue para el de siempre. La gran novedad de este año fue el galardón al mejor actor secundario.Quedó bacante. El cinco veces ganador de este premio solamente se presentó a la nominación principal. Toda una misión imposible. No bastó con que este año Ullrich acudiera con una “súper producción” avalada por un gran equipo de reparto con Kloden como artista revelación. Tras la decepción las críticas, incluso de su director, arrecian contra el alemán. Un posicionamiento injusto contra una auténtica estrella a la que sólo se le puede achacar un pequeño detalle. Haber nacido en la misma época que un extraterrestre americano. Ahora sus días en el Telekom parecen estar contados. Segundas partes nunca fueron buenas.

La grandeza

Anda la gente como despistada. Los periodistas, los ciclistas, los expertos. Mirando a un lado y a otro para no tener que reflexionar, hablando de temas por hablar. Parece que a nadie le interesa detenerse durante un instante porque entonces llegará ella, la pesadilla. Un monstruo con forma de pregunta.Un callejón con una única salida. Un remordimiento en la consciencia de todos que esperan olvidar con el tiempo. Saben que no será así. Son conscientes de que en cualquier momento dos signos de interrogación los rodearán y habrá que responder a la dichosa cuestión. Maldita la pregunta y malditas las respuestas.
Porque en este Tour se le ha dado carpetazo a dos grandes dilemas de la historia del ciclismo. Cada uno los contaba antes a su modo. Si le preguntabas a un español que ciclista era el más grande te dirían que Miguelón y como escalador Bahamontes, un francés te respondería que Hinault o un italiano te hablaría de Coppi. Ahora ya no pueden. Sólo se acepta Armstrong y Virenque como los más grandes. Seis tours y siete maillots a puntos rojos.El palmarés y la lógica son así de aplastantes. Sin ningún pero. Igual que ellos.

Cortocircuitos

A Bartoli se le cruzaron los cables hoy en medio de los alpes. Iba escapado pero en el ascenso a la Madeleine se quedó. Cuando le cogió el pelotón, a su director Rijs no se le ocurrió nada mejor que ponerlo a tirar del grupo. A Bartoli en ese momento se le pusieron en contacto el cable del orgullo y el del palmarés. Se echó a un lado de la carretera y abandonó el Tour. Otro que está sufriendo reacciones causadas por cortocircuitos es Moreau. A la eterna promesa francesa se le cruzan los cables por causa de la altura. Un fenómeno que debe ser de tipo físico-químico. El chispazo se produce cuando observa una pancarta de final de puerto. En ese momento se produce una reacción en Christophe que le impulsa a sprintar con lo primero que se mueva. El resultado es siempre el mismo. Da igual que su rival sea Virenque, Bettini o Mancebo. Moreau siempre pierde. A Lance le debe estar pasando algo parecido, sin embago el resultado es muy diferente. Todos sus cables se nutren de la energía producida por el movimiento centrífugo de sus piernas, el molinillo. Tanta energía está produciendo una sobrecarga de ambición que está dejando sin luz a sus rivales y al Tour.

El sexto sentido

Aitor González comentó tras su victoria del domingo que él no era el más fuerte de la escapada. Había ganado por saber moverse, elegir el momento preciso para atacar. Todo se lo debía a su sexto sentido. Un término que se está poniendo de moda en este mundillo. Una expresión que queda muy bien, con la que se puede explicar todo. Ahora parece que aquí nadie gana por darle más rápido a los pedales. Si careces de sentido adicional olvídate de ganar. En Ivan Basso este fenómeno extracorporal debe estar muy desarrollado observando el gran Tour que está haciendo. Pero su sexto sentido es diferente al convencional. En su caso tiene un 0% de ambición. Incluso se podría afirmar que es una prolongación del sentido de la vista, lo que le produce una fuerte fijación con la rueda trasera de Armstrong. Basso no sólo se diferencia por esto de los demás. También por su filosofía. Corre para quedar segundo, trabaja para su rival. Lo nunca visto. Sueña con pasar a la historia el próximo domingo. El día del sexto. El único sexto real. El sexto de Lance.