Los apátridas
Hay vida después del Tour. Pero la competición que toma su relevo tiene los días contados. Quizás la desaparición de la Copa del Mundo se deba a esto último, a su denominación. Todas sus pruebas se disputan en un pequeño radio de Europa, se la toman en serio cuatro equipos e interesa en dos países. Del Mundo no tiene demasiado. Aunque a veces suceden fenómenos cosmopolitas como el de ayer. Ganó en Alemania un australiano que corre en un equipo francés. Son los ciclistas aussies un caso extraño dentro del pelotón. Llevan ganadas tantas carreras en los últimos años que parecen un país clásico en este deporte. La realidad es otra. Dudo que lleguen a diez los ciclistas australianos profesionales. Aun así seguro que sus éxitos tienen más relevancia que los de otra etnia de corredores. Menos es imposible. Siempre se argumentó que las carreras de un día no calaban en España porque se carecía de especialistas. Ahora que tienen a dos de los mejores del mundo, literalmente se les margina. Sólo se recuerda a Freire y Astarloa cuando se acerca un campeonato del mundo o unas olimpiadas. Entonces se convierten en uno de los nuestros y se les coloca la bandera, la de conveniencia. Por cierto el maillot de Igor representa un arcoiris. Es que Astarloa es Campeón del Mundo.
3 comentarios
owen -
daniel -
Por outra parte tes que facer un comentario sobre alexandro valverde o extraterrestre do ciclismo mundial, eu cada dia preguntame se ese murciano e humano.
Por ultimo pidolle un favor a organización da volta a burgos, que vote o seu presentador de premios o sempre entendido do ciclismo Chico Pérez.
CuervoCelta -